¿En qué casos se realiza cesarea?

La cesárea es una cirugía mayor que se practica para extraer al bebé y a la placenta del útero materno, cuando por alguna razón el parto vaginal no es posible. La cesárea sólo debería realizarse cuando es médicamente necesaria y la Organización Mundial de la Salud dice que idealmente debería ocurrir en solo el 15% de los nacimientos máximo.

La cesárea conlleva unos riesgos diferentes a los del parto vaginal. Por ejemplo, aunque el riesgo de trauma perineal no ocurre en el parto vaginal, si pueden ocurrir problemas relacionados con la incisión de la cirugia (Por ejemplo: infección). Es por eso que las mujeres que se practican una cesárea deberían prepararse para el procedimiento y tener los cuidados adecuados en el postparto para asegurar una recuperación exitosa. 

Aunque puede salvar vidas, la cesárea a menudo se realiza sin necesidad médica, poniendo a las mujeres y a sus bebés en riesgo de problemas de salud a corto y a largo plazo.

Algunos ejemplos en los que está indicada son:

Indicaciones electivas (a discreción del médico y la madre)

• Madre con antecedente de 2 o más cesáreas o cirugías uterinas previas
• Enfermedad materna grave, infecciones maternas (VIH no controlado), incisión uterina tipo T.
• Fetales: Placenta baja oclusiva, feto de nalgas o transversal, fetos grandes o muy pequeños, bebés con malformaciones.
• Es posible solicitarla por decisión de la madre, aunque el trámite dependerá de tu sistema de salud y usualmente se requiere la valoración previa de un obstetra.
• Realización de Pomeroy o cirugía de ligadura de trompas en el mismo procedimiento.

Indicación médica:

• Posición del bebé que impide el paso normal por el canal del parto.
• Enfermedades de la mamá o el bebé que pueden ponerlos en riesgo en el parto.

Indicaciones Urgentes:

• Desprendimiento de placenta
• Parto que no avanza
• Sufrimiento del bebé dentro o fuera del parto
• Eclampsia