Masajes en el parto

Los beneficios de un masaje durante el parto son numerosos, tanto como para la madre como para el bebe. Favorece el proceso del parto, acorta la duración, produce bienestar y alivia el dolor, entre otros.

Y si tienes la posibilidad de que tu pareja o un familiar te de masajes durante el parto, debes aprovechar ya que ofrece muchos beneficios al proceso.

¿Cómo ayuda el masaje a aliviar el dolor?

Los masajes estimulan la producción de endorfinas, sustancias químicas naturales del cerebro que alivian el dolor y levantan el ánimo. Las endorfinas son las responsables del subidón que se siente después de hacer ejercicio o de reírse a carcajadas.

Durante el parto, el masaje te acerca a la persona que te atiende. Puede ser tu familiar o tu pareja. El tacto puede hacerte sentir mejor mientras soportas las contracciones y quizás estés cansada o asustada.

Hay determinadas posturas para el parto que facilitan el masaje. Por ejemplo, si te inclinas hacia adelante sobre una pelota de parto o si te sientas en una silla de espaldas, será más fácil para tu compañero de parto ejercer una presión constante en la parte baja de tu espalda o frotar tus hombros. 

El masaje puede aliviar el dolor y reducir la ansiedad en la primera fase del parto. Puede ayudar a sobrellevar las contracciones haciéndolas menos intensas y más llevaderas.

 

¿Son seguros los aceites de masaje durante el parto?

El aceite facilita el masaje y lo hace más agradable. Además, el masaje con aceite hace que se caliente la zona y tiene un efecto analgésico durante el parto.

Sin embargo, asegurarte de que eliges aceites seguros para el embarazo y el parto (en Acunar tenemos todo un modulo sobre el tema 😉). También es posible que en tu zona haya una matrona con formación especifica que pueda aconsejar.

¿Qué aceites usar?

El aceite facilita el masaje y lo hace más agradable. Además, el masaje con aceite hace que se caliente la zona y tiene un efecto analgésico durante el parto.

Sin embargo, asegurarte de que eliges aceites seguros para el embarazo y el parto (en Acunar tenemos todo un modulo sobre el tema 😉). También es posible que en tu zona haya una matrona con formación especifica que pueda aconsejar.

Los aceites esenciales son sustancias potentes y pueden interferir en las contracciones si se utilizan de forma incorrecta. Diluye siempre los aceites esenciales con un aceite portador o de base para hacer masajes. 

Prueba diluir dos gotas de aceite esencial en una cucharadita (5ml) de aceite base, como el de almendras dulces o el de semillas de uva. Si tiene sensibilidad a los frutos secos, evite las almendras dulces.

Los distintos aceites se adaptan a distintas necesidades. Por ejemplo, la lavanda es especialmente conocida por sus propiedades relajantes, mientras el ylang ylang suele tener un efecto calmante y sedante. También puedes utilizar un aceite base solo. 

 

Nuestros recomendados

¿Cuáles son las mejores zonas para masajear?

Masaje en los hombros

Tu compañero de parto debe poner las manos en los hombros y apoyarse ligeramente en ellas. Esto ayudará a bajar los hombros si ya los tienes encorvados por el estrés. A continuación, puede masajearte con los pulgares en pequeños círculos firmes detrás de los omóplatos. Dile si el masaje te está ayudando y cómo podría mejorarlo.

 

Es importante que evite los masajes frenéticos, ya que probablemente acelerarán tu respiración cuando el objetivo es relentizarla. 

Durante el parto, mantenga los hombros relajados, ya que esto le ayudará a respirar rítmicamente. Una respiración regular maximiza el oxígeno disponible tanto para ti como para tu bebé. Los masajes pueden ayudar a relajar los hombros y respirar rítmicamente.

Masaje de espalda

El masaje lumbar puede ayudar mucho con las contracciones fuertes. 

Al principio del parto, tu pareja puede acariciar el costado de la columna vertebral con la palma de la mano, desde el hombro hasta la parte inferior. 

En un parto avanzado, tu compañero de parto puede utilizar el talón de la mano para presionar firmemente sobre la base de la columna vertebral. 

 

Tendrá que ejercer bastante presión para contrarrestar las fuertes contracciones. Estas caricias largas y lentas pueden ser muy relajantes.

Masaje en los pies

Si estás  sentada o en la cama durante largos periodos del parto, el masaje de pies es ideal. Tu pareja puede acariciar los pies con firmeza desde el tobillo hasta los dedos, o hacer círculos con los pulgares por toda la planta de los pies. 

Y aunque no te guste que te toquen los pies, puede disfrutar de un masaje firme y rítmico.

 

Es posible que durante el parto tengas los pies muy fríos, por lo que el masaje te ayudará a calentarlos, el masaje debe ser firme o te hará un cosquilleo  insoportable.

Masaje de manos 

Tu compañero de parto puede simplemente acariciar cada mano por turnos, primero en le dorso, luego en la palma, bajando con firmeza desde la muñeca hasta la punta de los dedos. Puede hacer pequeños círculos por toda la palma y tirar suavemente de cada dedo para liberar tensión. Es una forma encantadora de estar cerca el uno del otro.

Y si te han puesto la epidural y estás tumbada en la cama, es difícil que te den un masaje en los hombros o espalda. Y si no sientes los pies, no tiene sentido que tu pareja te ofrezca un masaje en los pies. En estas circunstancias, el masaje de manos puede ser muy relajante.

¿Y si no quiero un masaje?

Si tu compañero de parto está dispuesto a darte un masaje durante el parto, puede sentirse decepcionado si no te gusta. Sin embargo, algunas mujeres no soportan que las toquen cuando tienen contracciones. Las contracciones pueden ser tan fuertes que incluso el más leve roce puede ser más de lo que puedas soportar.

A otras mujeres les ayudan tanto los masajes que quieren que su pareja les masajeé los hombros o les presione la parte baja de la espalda durante horas.

Tu compañero de parto debe ser flexible y comprender que las técnicas de masaje que aportan un gran confort al principio del parto pueden no ser útiles más adelante.

En las últimas fases del parto, muchas mujeres no soportan que las toquen e incluso pueden volverse bastante agresivas con su pareja. Saber escuchar, dar ánimos verbalmente, responder a tus necesidades y no tomarse las cosas como algo personal son cualidades clave de un buen compañero de parto.

 

¿Dónde puede aprender mi pareja a darme masajes?

Tú y tu pareja pueden practicar técnicas de masaje en casa con nuestros Cursos Acunar o contactar un masajista en tu área.

En algunos cursos prenatales, aunque en no todos, se enseñan habilidades físicas, como posturas y técnicas de masaje, para que tú y tu pareja practiquen, compruébalo antes de reservar un curso.

Otra opción es que tu matrona los ayude a ti y tu pareja dándonos masajes o enseñándoles a utilizar técnicas de masaje cuando estes en el parto.

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